jueves, 11 de agosto de 2011

Estrenado 28 o Más sabe el diablo, etc.

Mi amigo Román, tiene una forma fenomenal de hacerme sentir bien cada que comienzo a mal viajarme por estar en la antesala del tercer piso, habla sobre la intensidad y la locura, de las noches y los excesos, de los placeres y el sexo, de la intelectualidad y el arte, del conocimiento y el trabajo, al conjunto de todas esas características las llama: ser un adulto contemporáneo. Muchas de esas cosas son clichés raros, que en algún momento encajaron conmigo, pero que ahora no son más que intensos recuerdos otras las sigo disfrutando, como cuando recién se descubren. Contemporáneamente o a la antigua he llegado a la precisa edad de 28 años, logré llegar a esta cifra sin deprimirme de manera previa, por el contrario, esperaba ansiosa, los regalos, la fiesta, los abrazos, las reflexiones y todas esas cosas que vienen con los cumpleaños


Pasaron cosas muy interesantes la semana previa al cumpleaños, por ejemplo el lunes una caja misteriosa con los primeros 6 tomos de En busca del tiempo perdido, con una botella de tinto y un anónimo que decía: Mi último suspiro, si quieres el séptimo encuéntrame, Feliz cumpleaños. La verdad es que de inicio, no quería ni abrir los libros, que tal si tenían ántrax o algo parecido. Después pensé que tenía un acosador y claro cómo producto de horas y horas, viendo mentes criminales, asumí que el ignoto tendría que ser un hombre caucásico, a falta de Spencer (o por dios chiquito papá), comencé la investigación, hice una lista de sospechosos, en realidad era una lista muy pequeña, no hay tanta gente en este planeta que tuviera tan lindo detalle conmigo, fui tachándolos de uno por uno, a “X” porque Proust le puede sonar a marca de condones, a “Y” porque es proporcionalmente culto a su tacañería, a “Z” porque me entreviste con él y pude ver en sus ojos que no mentía cuando decía que él se declaraba inocente.

Cierto extraterrestre que rondaba mi tierra, me dio unas lecciones de vida intergaláctica maravillosas, útiles pero al mismo tiempo muy reveladoras, parecía en este momento que el mundo se venía abajo, después de observar el infinito, el mundo se vuelve tan pequeño, pero comprendí casi al instante que por eso mismo, más y más valioso.

Otro día de esa semana un corazón roto en casa, me obligó a descorchar el vino enviado por el ignoto, además de una botella más abandonada por mi ahora abstemio vecino, y entre charlas de faldas y de pantalones, mi buen amigo Romy me permitió abrir el regalo que desde el lunes aguardaba en mi habitación, con un letrero especificando que no podía ser abierto hasta exactamente el día 30, pero ese día para aligerar el sufrimiento del corazón roto, de él por supuesto, pude quitar ese rojo papel de Puca, que cubría la caja para descubrir “o por dios, es grandioso” tenía, bueno ahora tengo en mis manos la serie completa de los Thundercats… uoooo!! La mera onda, ya tenía hasta ese momento dos regalos muy rifados, el primero de un ente desconocido y el segundo de mi Cuatisimo, hermano Romy.

Durante toda la semana estuve planeando mi gran fiesta “sorpresa” de cumpleaños, mandé la invitación por la red social de moda, el objetivo reventar la casa, el contra tiempo mi vecino que decidió era la mejor idea traer a su esposa y a sus tres hijas a pasar unos días en la casa, y lo digo así literalmente en la casa, no en la ciudad, no, no de vacaciones, no, en la casa. El panorama ante eso no fue bueno, parecía que las cosas comenzaban a no salir bien. La fiesta tuvo que ser pospuesta, con resultados desastrosos, los invitados no llegaron, la festejada se enfermo y todo termino en cuatro cajas de pañuelos desechables y una cantidad impresionante de mocos.

Como sea, el día de mi cumpleaños, tuve un pastel familiar, papá y mamá vinieron a verme (bueno en realidad vinieron a ver a León, pero aprovecharon para darme mi abracito), sople velitas, le mordí al pastel y esas cosas bellas que no se pierden como costumbre en mi familia.

Puff, ya para cerrar este post, los 28 empezaron como ha sido toda mi vida, un excitante espiral de acontecimientos, hasta el momento no se quien es el ignoto, pero ya no quiero saberlo, no he terminado de ver los Thundercats pero en eso estoy, mi familia sigue siendo uno de los pilares más sólidos y maravillosos que tengo, todavía no se me terminan los mocos, pero al menos sé que de esta gripe no estaba destinada a morir. Por último, como último acto de depuración, arme una carpeta con todas las fotografías de pasados dolientes, las comprimí, las mandé muy lejos de mi alcance y elevé mi ancla definitivamente, lloré, si lloré mucho, no es fácil cerrar una ventana que sin querer mantienes abierta, pero ya, es momento de navegar otros horizontes y encontrarse en otras miradas.

Creo que ahora si me excedí con la dimensión y lo personal del post, pero como siempre digo en estos casos, "ES MI BLOG Y ESCRIBO LO QUE QUIERA".

2 visiones de otros espejos:

Karla dijo...

Me quedé a la mitad del post, justo en lo más emocionante, el anónimo!!!
jajaj, apenas tenga un tiempo libre vengo a leérmelo todo, adicionalmente a otras entradas que he dejado pasar.

Tú ánimo respecto al estreno de los 28 años me da ánimos, ya que en tres meses más andaré en las mismas. Saludos!!

Karla dijo...

¡Ya quiero saber quién es el ignoto! Qué emoción.

Estrenado 28 o Más sabe el diablo, etc.

Mi amigo Román, tiene una forma fenomenal de hacerme sentir bien cada que comienzo a mal viajarme por estar en la antesala del tercer piso, habla sobre la intensidad y la locura, de las noches y los excesos, de los placeres y el sexo, de la intelectualidad y el arte, del conocimiento y el trabajo, al conjunto de todas esas características las llama: ser un adulto contemporáneo. Muchas de esas cosas son clichés raros, que en algún momento encajaron conmigo, pero que ahora no son más que intensos recuerdos otras las sigo disfrutando, como cuando recién se descubren. Contemporáneamente o a la antigua he llegado a la precisa edad de 28 años, logré llegar a esta cifra sin deprimirme de manera previa, por el contrario, esperaba ansiosa, los regalos, la fiesta, los abrazos, las reflexiones y todas esas cosas que vienen con los cumpleaños


Pasaron cosas muy interesantes la semana previa al cumpleaños, por ejemplo el lunes una caja misteriosa con los primeros 6 tomos de En busca del tiempo perdido, con una botella de tinto y un anónimo que decía: Mi último suspiro, si quieres el séptimo encuéntrame, Feliz cumpleaños. La verdad es que de inicio, no quería ni abrir los libros, que tal si tenían ántrax o algo parecido. Después pensé que tenía un acosador y claro cómo producto de horas y horas, viendo mentes criminales, asumí que el ignoto tendría que ser un hombre caucásico, a falta de Spencer (o por dios chiquito papá), comencé la investigación, hice una lista de sospechosos, en realidad era una lista muy pequeña, no hay tanta gente en este planeta que tuviera tan lindo detalle conmigo, fui tachándolos de uno por uno, a “X” porque Proust le puede sonar a marca de condones, a “Y” porque es proporcionalmente culto a su tacañería, a “Z” porque me entreviste con él y pude ver en sus ojos que no mentía cuando decía que él se declaraba inocente.

Cierto extraterrestre que rondaba mi tierra, me dio unas lecciones de vida intergaláctica maravillosas, útiles pero al mismo tiempo muy reveladoras, parecía en este momento que el mundo se venía abajo, después de observar el infinito, el mundo se vuelve tan pequeño, pero comprendí casi al instante que por eso mismo, más y más valioso.

Otro día de esa semana un corazón roto en casa, me obligó a descorchar el vino enviado por el ignoto, además de una botella más abandonada por mi ahora abstemio vecino, y entre charlas de faldas y de pantalones, mi buen amigo Romy me permitió abrir el regalo que desde el lunes aguardaba en mi habitación, con un letrero especificando que no podía ser abierto hasta exactamente el día 30, pero ese día para aligerar el sufrimiento del corazón roto, de él por supuesto, pude quitar ese rojo papel de Puca, que cubría la caja para descubrir “o por dios, es grandioso” tenía, bueno ahora tengo en mis manos la serie completa de los Thundercats… uoooo!! La mera onda, ya tenía hasta ese momento dos regalos muy rifados, el primero de un ente desconocido y el segundo de mi Cuatisimo, hermano Romy.

Durante toda la semana estuve planeando mi gran fiesta “sorpresa” de cumpleaños, mandé la invitación por la red social de moda, el objetivo reventar la casa, el contra tiempo mi vecino que decidió era la mejor idea traer a su esposa y a sus tres hijas a pasar unos días en la casa, y lo digo así literalmente en la casa, no en la ciudad, no, no de vacaciones, no, en la casa. El panorama ante eso no fue bueno, parecía que las cosas comenzaban a no salir bien. La fiesta tuvo que ser pospuesta, con resultados desastrosos, los invitados no llegaron, la festejada se enfermo y todo termino en cuatro cajas de pañuelos desechables y una cantidad impresionante de mocos.

Como sea, el día de mi cumpleaños, tuve un pastel familiar, papá y mamá vinieron a verme (bueno en realidad vinieron a ver a León, pero aprovecharon para darme mi abracito), sople velitas, le mordí al pastel y esas cosas bellas que no se pierden como costumbre en mi familia.

Puff, ya para cerrar este post, los 28 empezaron como ha sido toda mi vida, un excitante espiral de acontecimientos, hasta el momento no se quien es el ignoto, pero ya no quiero saberlo, no he terminado de ver los Thundercats pero en eso estoy, mi familia sigue siendo uno de los pilares más sólidos y maravillosos que tengo, todavía no se me terminan los mocos, pero al menos sé que de esta gripe no estaba destinada a morir. Por último, como último acto de depuración, arme una carpeta con todas las fotografías de pasados dolientes, las comprimí, las mandé muy lejos de mi alcance y elevé mi ancla definitivamente, lloré, si lloré mucho, no es fácil cerrar una ventana que sin querer mantienes abierta, pero ya, es momento de navegar otros horizontes y encontrarse en otras miradas.

Creo que ahora si me excedí con la dimensión y lo personal del post, pero como siempre digo en estos casos, "ES MI BLOG Y ESCRIBO LO QUE QUIERA".
2 comentarios:

Me quedé a la mitad del post, justo en lo más emocionante, el anónimo!!!
jajaj, apenas tenga un tiempo libre vengo a leérmelo todo, adicionalmente a otras entradas que he dejado pasar.

Tú ánimo respecto al estreno de los 28 años me da ánimos, ya que en tres meses más andaré en las mismas. Saludos!!


¡Ya quiero saber quién es el ignoto! Qué emoción.